Camino de Entrepeñas (I)
Recorremos la Alcarria tras los pasos del nobel. La etapa de hoy, algo larga (unos 34 kilómetros), podemos hacerla en dos tramos si así lo deseamos.
Dejamos Trillo y nos situamos junto al puente que cruza el río, subiremos por la calle Camino de Viana que asciende y gana altura rápidamente. Dejamos a la izquierda la residencia de empleados de la Central de Trillo y poco después termina el asfalto.
Durante todo el recorrido vamos a ver marcas de la ruta jacobea y otras blancas y verdes de una ruta senderista marcada por el ayuntamiento de Trillo.
A poco después de pasar el campo de moto cross abandonamos el carril por una senda que nos sacará de nuevo a la misma pista y que unos centenares de metros después nos vuelve a aparecer otra vez la senda por la que seguiremos; estamos pasando por la Entrepeña con bellas vista del Tajo y del valle. La senda termina en una pista por la que seguiremos durante casi un kilómetro para abandonarla por otra senda que nos sale a la izquierda.
La senda transita por un bello paraje y de frente vemos ya las Tetas de Viana que son dos cerros iguales y al que solo se puede subir a una de ella.
La senda va ascendiendo poco a poco y llega a una pista. Si continuamos a la derecha, encontramos poco después una senda que asciende fuertemente hasta el collado que conforman las dos tetas. Nosotros seguiremos por la pista de la izquierda para ir camino de Viana, siguiendo las marcas amarillas a contramano.
A unos 500 metros nos encontramos una senda que empieza a descender, seguiremos por ella a la derecha.
A mitad de camino pasamos junto a la derruida ermita de San Juan y poco después con la fuente del mismo nombre.
La senda nos saca a un carril principal, le seguiremos de frente para llegar a Viana de Mondéjar. Poco antes de entrar en el pueblo hay una fuente a la derecha.
Si tenemos tiempo podremos subir a las Tetas de Viana, como ya hemos dicho solo a una de ellas se puede subir. Volveremos sobre nuestros pasos y en la misma curva hay una senda muy ancha que rápidamente coge altura, esta señalizada. Esta senda nos saca a una pista que asciende y por la que seguiremos durante un par de kilómetros. La pista muere en un collado entre los dos montes. Allí mismo cogeremos el camino de la izquierda que empieza a ascender y termina en una escalera de mano metálica que nos permite acceder a la meseta. Conviene recorrer todo el perímetro y observar las vistas y deleitarse con el paisaje.
Una vez de vuelta en el pueblo y en el mismo punto donde hemos cogido el camino que nos lleva a las tetas, seguimos por la pista que desciende y nos lleva a La Puerta.
A mitad de camino nos topamos con la Fuente del Oro con un buen chorro. La pista es de buen firme y en pocos kilómetros lleva al bello puente que nos permite cruzar el arroyo de la Solana y accedemos a La Puerta.

Hasta Budia vamos a hacer una variante, que el escritor no hizo, y para poder caminar seguros. Desde La Puerta cogemos un camino carretero que sale junto al pueblo, este camino nos lleva por el valle y teniendo a la derecha el arroyo de la Solana.
Caminaremos durante unos tres kilómetros hasta que sobrepasamos el barranco del Cojo, y nuestro camino se convierte en senda para llegar al final del arroyo de del Posadero donde parte el camino que asciende fuertemente y nos lleva a Cereceda.
Podemos visitar el pueblo con su bella iglesia románica.
Saldremos de Cereceda por la carretera y en menos de un kilómetro cogemos la pista que nos sale a la izquierda y que en cuatro o cinco kilómetros nos lleva a Mantiel. Hemos de olvidarnos de todos los carriles que nos salgan a derecha e izquierda, siempre seguiremos por el nuestro.
De Mantiel nos situamos cerca de la iglesia para acceder a la fuente y desde allí encontramos con un carril que toma dirección oeste y nos lleva a Chillarón del Rey.
Vemos bellos parajes de la zona, pues estamos a una considerable altura. Pasamos junto a la fuente del Escalón y poco después el carril se convierte en senda; aquí encontraremos las flechas amarillas del camino jacobeo y otras de color blanco y roja del GR Caminos Naturales del Tajo.
Un par de kilómetros después, tras un vertiginosos descenso el camino termina en Chillarón el Rey pasando junto a la iglesia de Nuestra Señora de los Huertos con un bello retablo sin pintar.
Salimos de Chillarón siguiendo las marcas del citado GR y poco después cruzamos la carretera para continuar por un carril que se convierte en senda y tras tres kilómetros llegamos a la N-204 para cruzar el embalse de Entrepeñas por el viaducto. Recalcamos que siguiendo las indicaciones del GR no tenemos problemas ya que nuestro sendero es coincidente.
Cruzamos el embalse por el viaducto y aquí abandonamos ya el citado GR, nosotros hemos de continuar por la carretera en dirección a Durón. Es conveniente circula por la izquierda con el chaleco reflectante puesto.
Aproximadamente a los cuatro kilómetros llegamos a Durón y nos dirigimos a la zona donde se encuentra el Paso del Tirador, donde hay unas barbacoas y la fuente Blanquina, lugar apropiado para descansar.
Y tal como lo hizo el viajero, al que en este paso le pilló una fuerte tormenta, nosotros continuaremos desde la fuente por una senda muy marcada que nos va a llevar a Budia, lugar donde damos por terminada la etapa de hoy.